Cat.yetana I de Alba: reina de Cataluña

Lo que son las cosas. Cayetana de Alba podría optar al trono de Edimburgo una vez proclamada la independencia de Escocia, pues no en vano desciende de James Fitz-James, primer duque de Berwick, e hijo bastardo del último rey de Escocia, el Estuardo Jacobo VII. Casualidades de la vida: el duque de Berwick, esto es, el antepasado de Cayetana de Alba, que acumula la nadería de 20 grandezas de España y cuyas andanzas y romances hacen las delicias de la prensa rosa, mantuvo una muy estrecha y especialísima relación con Cataluña. En efecto, nacionalizado francés y nombrado duque de Liria y Mariscal de Francia por Luis XIV, mandó las tropas borbónicas en la batalla de Almansa y, toma del frasco, dirigió el asalto final a la ciudad de Barcelona, mientras el austracista Rafael Casanova enarbolaba el estandarte de santa Eulalia sobre las murallas de la ciudad sitiada e instaba a los barceloneses, como es sabido, salvo por los nacionalistas, a resistir en nombre de la libertad de España la feroz acometida felipista.

Los vínculos de la Duquesa de Alba con Escocia y Cataluña están, pues, sobradamente acreditados. Nos recuerda la fotogénica y grácil Cat.yetana a Isabel Amalia Eugenia, Sissí, duquesa de Baviera, emperatriz de Austria y reina consorte de Hungría, inmortalizada en el celuloide por la bellísima y malograda Romy Schneider. El destino ha querido unir, en una conjunción planetaria sin precedentes (exceptuada la de Obama y ZP, Leire Pajín dixit), a Cataluña y Escocia en sus procelosas singladuras en pos de la plena libertad nacional. Así pues, esos caminos emprendidos por separado, habrían de confluir necesariamente ahormados por un nexo, por un elemento integrador que es… nuestros patanes lo han adivinado… ¡la duquesa de Alba!... cuya aristocrática testa habría de ceñir la corona de una nueva doble monarquía, a imagen y semejanza de la austrohúngara… ¡la doble monarquía catalano-escocesa!... El currículum linajudo, dinástico, de Cat.yetana da para promover el sensacional invento.

Pero faltaba un dato capital para cerrar el círculo y Patanes Sin Fronteras, en su incansable labor detectivesca, lo ha hallado felizmente. Necesitábamos un título nobiliario de cierto abolengo, cien por cien catalán, entre los muchos atesorados por la candidata al trono, que avalara sus legítimas pretensiones. Y nuestras metódicas pesquisas han dado sus frutos: la duquesa de Alba es… ¡tachán!... condesa de Guimerá desde el 6 de septiembre de 2007. Cataluña y Escocia unidas al fin por el frondoso árbol genealógico de la casa de Alba. Y las sinergias entre ambos territorios fraternalmente enlazados por el cetro real acuden solas, en cascada, a nuestra fértil imaginación: los sardanistas ejecutarán sus pasos ataviados con el tradicional kilt escocés, beberemos whisky de malta, de la isla de Jura, sin pagar tasas de importación, y a cambio los escoceses degustarán, quid pro quo (y que Dios les asista), nuestros digestivos Aromas de Montserrat. Incorporaremos la gaita al repertorio instrumental de nuestras cobles al tiempo que los escoceses se familiarizarán con la gralla (dulzaina) en una suerte de enriquecedor diálogo musical. El simpatiquísimo Nessie, el monstruo del Lago Ness, comparecerá en la frangible superficie de las frías aguas tocado con una barretina. Y, finalmente, el rey consorte, Alfonso Díaz, gracias a su contrastada experiencia en el sector tributario, gobernará con sabia y prudente mano la Hacienda catalana de Artur Mas.

PS.- Las plazas de bufones de la corte ya han sido asignadas a Los Morancos, Albert Pla ejercerá el cargo de juglar, de trovador, de la naciente monarquía, y Sánchez Piñol, Victus et Patanicus, será el cronista oficial del reino. En breve, PSF dirigirá una carta a la condesa de Guimerá para que consienta en proclamarse reina de Cataluña y Escocia, y otra, gentileza de Patanes, sin cobrar royalties por la idea, al Consejo Asesor para la Transición Nacional… ¡Dios salve a la reina!

*GUIMERÀ: 
Guimerà, es un municipio de España en la provincia de Lérida, Comunidad autónoma de Cataluña, con una superficie de 25,8 km², una población de 341 habitantes (INE 2008) y una densidad de población de 13,22 hab/km².